28 noviembre, 2011

Las Verdades Védicas pertenecen al mundo entero



Las verdades védicas pertenecen al mundo entero

 A pesar de haber nacido en la raza humana y rodeado por un ambiente humano, el hombre ha olvidado las cualidades esenciales de la raza humana. Entre todos los animales y entre todas las cosas vivas que nacen, el nacimiento de un ser humano es algo único. Ser merecedor del regalo de nacer como hombre es una cosa extraordinariamente difícil. Habiendo obtenido ese regalo de las manos de Dios y teniendo éxito de nacer corno hombre, si no usan plenamente un regalo semejante, estarán cometiendo un gran pecado. Deben comprender que nacer como hombre, en este nacimiento, es el resultado de haber logrado y adquirido el fruto de muchas buenas acciones que han hecho en varias vidas pasadas.

El cuerpo es como un bote. La vida es como un río y tienen que cruzar ese río y llegar a su destino, destino que es el de la Divinidad. La vida presente es una vida en el mundo contemporáneo. En este proceso de tratar de cruzar el río de la vida y alcanzar el destino de la Divinidad, el bote que han de usar, es decir el cuerpo, ha de ser protegido y muy cuidado. Este bote no debería hacer agua estando en ruta. Debemos confiar en que todos los estudiantes que se reúnen hoy aquí son botes realmente buenos, fuertes y nuevos sin posibilidades de agrietarse. Si no hacen un intento de usar los botes como están ahora, buenos como están, sin grietas, y prefieren posponer y tratar de usar estos mismos botes cuando se han vuelto viejos y llenos de agujeros, entonces sus vidas estarán seguramente sujetas a algunas dificultades y perjuicios. A este cuerpo se le denomina "deha", nombre que ha adquirido porque significa que el cuerpo ha sido hecho esencialmente de elementos que finalmente se destruirán. La temporalidad o la naturaleza pasajera de este cuerpo está descripta justamente por este nombre. Además, la Fuerza Divina indestructible que ha penetrado en este cuerpo perecedero ha sido llamada el Alma del hombre o Espíritu humano. Porque el cuerpo contiene este Espíritu Divino indestructible, al cuerpo vivo también se lo ha llamado "hombre". En la palabra "manava" que significa hombre, podemos ver la Divinidad que está presente en el hombre. "Manava" tiene tres sílabas. La primera Cima" significa "ajñana" o ignorancia, ausencia de conocimiento. La segunda "na" expresa el deseo de que la ignorancia y ausencia de conocimiento desaparezcan. La tercera "va" expresa el mandato de que cada uno debiera conducirse de una manera apropiada que lleve a eliminar la ignorancia. La ignorancia es equivalente o sinónimo de muerte. Así no tiene sentido atribuirle ignorancia al hombre. Hoy se hace esto olvidando el Alma inmortal en el hombre y dando importancia a lo que es temporal y transitorio sin dar la atención necesaria a lo que es Divino en ustedes. Esto ha traído una cierta deshonra y pérdida de reputación a las mismas cualidades humanas. Aquello que proclama la verdadera esencia del hombre, que hace evidente la verdadera naturaleza humana, es llamado Vedanta.